domingo, 15 de julio de 2007

Just do it...

Por qué escribo más cuando estoy triste?

Por todo lo escrito pareciera que vivo llorando, quejándome, que nada en esta vida me hace feliz...

Pero no es así, en realidad es lo contrario, generalmente soy una persona alegre y positiva a la que le encanta reír y hacer reír, alguien a quien le fascina disfrutar de cada momento y de esas personas especiales que me acompañan en el camino.

Sin embargo, también existe esta otra persona, la que se queja, la que se confunde, la que se cuestiona, la que se siente sola y vulnerable. Supongo que todos tenemos esta parte dentro de nosotros, sólo que para algunos es más fácil mostrarla, a mi no me es sencillo, prefiero mostrar mi lado feliz, a esa persona que no se derrumba y que trata de ver en todo una oportunidad para aprender.

Son realmente muy pocos aquellos que han podido ver a ese ser frágil, sólo e inseguro. Quizá por eso es esa parte de mi la que generalmente escribe; es la que más necesita hablar, desahogarse, expresarse.

O tal vez es que es mucho más difícil expresar con palabras la felicidad, y que esos momentos no se tienen que cuestionar o descifrar, sino simplemente disfutar y vivir.

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